Para los que no saben mucho la historia, el acordeón con el que toco yo era pertenencia de mi abuelo, con ese intrumento era que tocaba él.
Si bien yo lo conocí a mi abuelo el vivía en Esquina, y como yo siempre viví en Buenos Aires sólo lo veíamos en las vacaciones. Por eso tuve siempre una buena relación lo visitabamos en su hermosa casa y estabamos con él, más que nada siempre con mi papá, pero de todos los lugares que visitabamos durante las vacaciones tal vez su casa era el que menos ibamos.
No conocí mucho de mi abuelo y nada fui conociendo desde que empezamos a tocar con el conjunto, dado que muchas personas que lo conocieron a él se acercaban para consultarme acerca de nuestro parentezco.
Supe por ejemplo que tuvo una pista de baile en Laferrere, Pcia. de Buenos Aires, que fue amigo de grandes músicos como por ejemplo de Don Ernesto Montiel...
Y que tuvo un conjunto llamado CUARTETO SAN MARTIN, el cual compartia con Cena, Gimenez y Osvaldo Mendoza. De allí el nombre de nuestro conjunto, CONJUNTO SAN MARTIN.
Bueno en resumen, el acordeon de Don Salvador me llega en el año 2004, un gran amigo mío Gustavo Luna me lo reforma a 3 hileras y allí a medidados de 2005 empiezo a aprender a tocar con él. Jamás crucé una palabra con mi abuelo referida a la música, nunca hablamos de los grandes del chamamé, de esas hermosas canciones que existen... De allí tal vez lo mágico, misterioso y fuerte de esto que las cosas se transmiten a través de la sangre... lo fuerte que es la herencia, los genes... los sentimientos...
Hago esta introducción para poner en contexto lo que aquí les dejo y que quiero compartir con todos ustedes, los seguidores del Conjunto San Martin...
ABUELO SALVADOR
Sin querer dejaste la huella, y me mostraste el camino...
Y dijiste sin palabras ¨nieto, este es tu destino¨.
A través de tu música, tus letras y tu arte,
no necesitaste palabras y dijiste, yo voy a enseñarte...
Tal vez muchos no lo sepan, y pocos se den cuenta...
que la música fue nuestro nexo, para que yo te conociera
El camino ya estaba señalado, solo hubo que empujarme
pusiste tu acordeón y el chamamé, para nunca más dejarme...
Hoy me siento cerca pero lejos, al intentar agradecerte,
porque no puedo hablarte, abrazarte o tenerte....
Por eso como dijo Don Ernesto, hoy no sólo quiero, sino debo
con mi música abuelo, decirte eso que decir no puedo...
Sólo lo quería compartir con ustedes...
2 de noviembre, tambien es el cumple de mi mamá, que mientras duerme yo le hago ruido desde mi habitación con el acordeón... gracias Ma!!! Feliz Cumple!!!
Hasta siempre!!!
